1.
Coach
educativo
2.
Tutor
3.
Orientador
4.
Asesor
5.
Influencer
Para
empezar voy a intentar describir cada una…
- Coaching educativo: El coaching es una metodología que permite el máximo desarrollo personal y la profesional de los individuos e influye en la transformación de éstos, provocando cambios de perspectiva, aumentando la motivación, el compromiso y la responsabilidad, y como no, el aprendizaje. En concreto, el coaching no consiste en enseñar, sino en realizar las preguntas oportunas para que el coacheado las responda y por sí mismo sepa encontrar las respuestas. ¿Por qué?, porque no existe una respuesta única, cada uno puede tener la suya, y lo que se trata es de crear las condiciones necesarias para aprender y crecer. Es uno de los mejores métodos para mejorar el rendimiento de las personas. Por tanto, el coaching educativo plantea o replantea una forma distinta de aprender.
- Tutor: El cargo del tutor al nivel educativo es orientar a el grupo que te asignen como docente, coordinar y presidir las sesiones de evaluación de tu grupo, facilitar la integración y la participación de la clase, colaborar con el departamento de orientación, mediar entre la clase y los demás profesores, coordinar las actividades complementarias del grupo y facilitar la cooperación educativa padres-docentes.
- Orientador: como definí en el anterior post, un orientador educativo es un especialista (psicólogo o pedagogo) que asesora y ayuda tanto a los profesores como a los alumnos y padres de un centro educativo tanto a nivel personal, académico y/o profesional.
- Asesor: El asesor ofrece servicio a una persona busca apoyo en otra para aclarar cómo realizar cierta actividad. Esta figura puede complementarse o incluso confundirse con el del coach. ¿Dónde está la diferencia?, en el método empleado. Un coach es un asesor que emplea un determinado procedimiento, mientras que no todos los asesores tiene porqué emplear el coaching, y ofrecer ayuda igualmente.
- Influencer: Un influencer es una persona que cuenta con cierta credibilidad sobre un tema concreto, normalmente con presencia e influencia en redes sociales por lo que puede llegar a convertirse en un prescriptor interesante en diferentes ámbitos: para una marca, en el bricolaje, etc. y, cómo no, en temas educativos.
Como
conclusión podemos concluir que estos diferentes roles tienen mucho en común: van
dirigidas a personas y dan servicios para mejorar la calidad de vida de los
individuos a través de una comunicación profesional constante.
Nosotros como
profesores debemos recordar que podemos ser todo para nuestros alumnos. La
clave está en la comunicación, solo si observamos las señales podremos adecuar
nuestros comportamientos para lograr determinados objetivos; solo si
escuchamos, podemos aconsejar u orientar o asesorar...
Debemos ser
“influencers” para nuestros alumnos y debemos crear tendencia sobre las
estrategias de estudio, la importancia de la educación, la ética, etc.
Hagamos ahora un itinerario formativo
para ser alguien con influencia en la educación. Como elementos fundamentales,
las características que tiene que tener son:
- Capacidad de escucha activa, entendiendo a tu interlocutor y realizando las preguntas oportunas para comprender bien sus necesidades, dificultades, aspiraciones, etc.
- Experiencia. Cuánta más situaciones se hayan experimentado, más fácil será entender y poder dar consejos a los interlocutores.
- Conocimiento de los reglamentos y leyes educativas. Sólo con este conocimiento sabremos lo que es posible y lo que no.
- Espíritu de ayuda, capacidad de empatizar con tu interlocutor con la voluntad de ayudarle a encontrar una solución o a realizar su cometido de la mejor manera posible.
Para adquirir competencia en estos
campos citados, sería precisa una formación adecuada en cada uno de ellos.
Supongamos que queremos formar a un
coach. Está claro que como requisito es necesaria una predisposición natural
empática, pero eso no basta. Como hemos dicho, serán necesarios:
- Cursos para conocer el ámbito reglamentario de la educación.
- Experiencia suficiente en problemas comunes, o un curso que tratara de ello, o como mínimo una serie de entrevistas cuidadosamente planificada con docentes que pudieran enseñarle. En cualquiera de los casos, sería muy aconsejable que personas con experiencia pudieran ejercer de tutores para aconsejar a su vez al nuevo coach.
- Cursos específicos de coaching, ya que se trata de una técnica específica que requiere disciplina y una metodología clara en su aplicación.
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